sábado, junio 18, 2005

Madre Patria

Aquí estoy, desde hace mucho tiempo, esperando en la Madre Patria el momento en que nadie estará más arriba que yo. Ya casi.
Unos días más, sólo unos días, menos de una semana y estará aquí, menos de una semana y seré la mujer más feliz del mundo.
Todo lo que no he conocido de Madrid e incluso de Europa lo voy a conocer ahora, creo que si no fuera porque viene yo seguiría sin ir al Prado o conocer el Bernabeu, ya sé que es un sacrilegio, sobre todo no haber ido al primero en tanto tiempo, pero todo ha sido distinto a como se planeó y las cosas de repente se complican.
Ahora tengo oportunidad de todo, ir, venir, conocer, "turistear", sentirme algo "giri" y disfrutar del que ha sido mi hogar por tantos meses, y con una compañía muy especial.
Sé que todo nos va a salir bien, ya quiero que llegues mi alma, ya quiero que llegues y cuando llegues no podré pedir nada más.

martes, junio 14, 2005

Responsabilidad

Llevo 9 meses viviendo lejos de "casa" me refiero a lejos de mi hogar dulce hogar, desde el 1 de octubre del año pasado he tenido que buscarme la vida en un pais extranjero, desconocido y nuevo para mi, todos estos meses han servido de experiencia para el futuro ya que por fin he conocido lo que significa la palabra: independencia.
Y eso a medias, porque económicamente no soy tan independiente como debería, o como en algún momento esperaba.
Me he adaptado de lo mejor, vivir en un depa donde todo es tuyo, desde el rincón favorito de tu cuarto hasta el nido de hormigas de la cocina es una experiencia genial, eres dueño de tanto de tus demadres como de tu orden y mantener las cosas "perfectas" sólo depende de ti. Ya no cuentas con una señora que te hace la limpieza, ni con la sopita caliente de tu madre, ni con el domingo inamovible de tu padre y hay que atenerse a lo que hay.
Yo lo entiendo, mmmh... más bien, YO LO ENTIENDO, porque al parecer soy la única que lo hace. Si pretendes vivir solo, aprende y atente a las consecuencias de vivir solo, y sino te alcanza pa las chelas porque tienes que pagar la renta pues te jodes y dejas las chelas, y si no tienes pa comer pues no te gasta lo que te queda en el antro más fresa de Madrid, y si no eres capaz de hacer frente a las responsabilidades de un departamento como "adulto" que se supone - y muy supone - que eres, entonces lárgate, vivir en un departamento con compañeros de piso no significa "jugar a la casita", no significa hacer fiestas todos los días, ni llegar a la hora que sea o en las condiciones que te den la gana, significa limpiar, pagar cuentas, ordenar, ponerse de acuerdo y ante todo respetar tanto el espacio como los individuos que en él ocupan.
Ahora yo me pregunto, ¿porque soy la única que lo entiende?, ¿porque agarran mis cosas sin pedirlas y para colmo estas jamás vuelven a su lugar? ¿porque soy la única que va al banco a depositar el dinero de la renta? ¿porque siempre me dan el dinero incompleto? ¿que no saben contar? ¿la memoria no les da para cordarse cuanto es cada mes? ¿porque yo saco la basura y recibo las reclamaciones cuando no se tira? ¿porque soy la única que cambia los rollos de papel y limpia el baño? ¿porque siempre hace falta dinero en la renta y en los servicios y yo lo pongo? en pocas palabras, ¿porque chingados siempre le tengo que salvar el culo al mundo? cuando las responsabilidades de vivir aquí son y debieran ser exactamente las mismas.
Simplemente esto pasa porque soy la única que comprende esa responsabilidad y lo que abarca, porque no soy capaz de plantarme frente a la casera, poner cara de mono miope y decir estupidamente: - no tenemos el dinero completo, por favor no nos corra, tampoco tenemos lo de los servicios, pero porfavor no nos corte el gas, nos gusta bañarnos con agua caliente - POR DIOS!
Y ahí voy a hacerla de mujer maravilla, y como el banco que soy - porque parece que soy solo eso - salvo al mundo de nuevo.
Ahora presento mi queja a ese mundo:
Si no tienes para pagar LARGATE
Si te da hueva limpiar, cambiar los rollos, cocinar, mantener el orden etc. LARGATE
Si no comprendes que hay que respetar el espacio y las cosas de los demás LARGATE
Si no entiendes que respetar es no hacer ruido cuando hay gente durmiendo LARGATE
Si no entiendes que PROHIBIDO significa NI EN SUEÑOS, LARGATE
Si eres capaz de pedir pero no de dar LARGATE

Simple y sencillamente largate, porque ya estoy hasta la madre, no vivo sola para tener que hacer frente a las batallas de esta cosa solo yo, y no voy a vivir salvandole el trasero a un montón de escuicles malagradecidos que no saben vivir fuera de casa, que sin Papi se mueren y creen que esto es un hotel de paso para pasar sus largas vacaciones en España.

Al carajo con todos, quiero mis cosas, mi orden, mi privacidad, y sobre todo mi dinero !pinches chamaquitos muertos de hambre!

jueves, junio 02, 2005

De precios altos

Sales de casa cargando un costal de ilusiones sostenidas con voluntad para lograrlas y la sonrisa inherente de la independencia, y es que no hay nada mejor que ser dueño de tu propio destino. Te guste o no arrastras una cadena de sentimientos y muchos recuerdos, pero ahora en vez de detenerte te alientan a construir tu nuevo mundo, y después serán los que te sostengan y mantengan en pie.
En la cabeza llevas tantos pensamientos que empiezas a ladearla de tanto que pesa, hay mucha gente corriendo por tu memoria y ese sin fin de fotografías de momentos surge como flashes en una entrega de premios internacionales. Comienza el nudo en la garganta, pero no, no puedes permitírtelo, no puedes debilitarte en ese momento cuando necesitas de todas tus fuerzas para dar el gran paso, para hacer lo único que vale la pena en la vida: lo que quieres.
Ahora es el momento de los suspiros, te estás deteniendo en ciertas imágenes y ya no las contemplas a través de la memoria sino del corazón, te aferras a la carta que te firmaron todos, a lo último que te regalaron y no queda más que apretar los dientes y seguir.
La hora de partir, lo que sientes, no tiene nombre, estás dejando tantas cosas… pero en tu cabeza resuenan las palabras de aliento, la fuerza está contigo, no hay despedida, sería darse cuenta que ya no volverás, aunque así es realmente, voces, palabras, risas y llanto te rodean, ya es el último paso, y tienes que voltear de nuevo con los nervios hechos polvo y escuchar esa canción que una noche antes marcó el mejor momento y el último, ya no están, ahora todo depende de ti.
Has llegado a tu destino, eres más que feliz, no te das cuenta de nada, no sientes frío aunque hace, no sientes la lluvia, no respiras el aire, y aunque no conoces nada no te sientes perdido pues estás por fin en el escenario de tus sueños, ya no te importa nada más que empezar la obra.
Y el tiempo pasa, y las cosas cambian, y ya nada es lo mismo, y ya nada es igual, y toda la gente es nueva, y ya no escuchas esa canción, y ya no vas a los mismos lugares, ni hablas igual, ni te vistes igual, ni eres la misma persona, ¿mejor?, ¿peor?, no sabes.
Llegas a casa, como todos los días, “casa”, no están tus posters, ni tu colección de llaveros, ni tus discos, ni tu fotos, la pared ni siquiera es del mismo color, no está tu tasa favorita, ni tu acolchado sillón, no está tu cómoda almohada, ni tu enorme cama, ni tu espejo, ni el mueble del baño que rompiste, pero es tu casa, lo sabes, y te sientes en ella.
Ahora todos los días te levantas, sales a correr en territorio desconocido, vuelves, recoges el correo, te haces de comer, lavas tu ropa, vas a la universidad, compras una cocacola, lees el periódico, tomas el autobús, ves la televisión, saludas a tus compañeros, cenas en la sala, lavas tus trastes… ahora pagas la renta, la luz, el agua, el gas, el teléfono, te robas el internet, lees mucho, comes menos, tomas más agua y engordas más, sales más seguido, tomas demasiado alcohol, viajas mucho, estudias igual y te cuesta el doble de trabajo por la mitad de resultados, aumentó el estrés, los dolores de cabeza, el dinero no te alcanza, la cerveza es insuficiente y cotidiana, y desvelarte se ha hecho una costumbre, un hobbie una necesidad. Más ojeras, menos cabello, y contadas sonrisas, menos humor, más dolencias, menos disposición, un desastre.
Pensaste que todo permanecería igual aunque en el fondo sabías que no sería así, caray, no te despediste de nada, te fuiste tan rápido, y ahora nunca volverás a casa, ni a tus posters, ni tu cama, ni aquel mueble de baño que rompiste, ni correrás en tu calle, ni estarás con la misma gente, ya no te verán igual, simplemente has cambiado, has estado mucho tiempo lejos en un mundo diferente y ahora simplemente ya no eres el mismo, no puedes ser el mismo. Pero los largos suspiros, las noches en vela, la tira de recuerdos que pasa una y otra vez frente a tus ojos cerrados tiene que terminar.
Entonces despiertas, a otro día en que correrás en territorio desconocido… no, no ya no, no, llevas mucho tiempo ahí, ya es territorio conocido, ya te saludan por la calle, estás a punto de terminar la universidad, a eso viniste, tienes nuevos posters y fotos, y momentos pintados en cada esquina de esa, tu casa, tuya y de nadie más, y cada rincón de tu vida se ha rellenado por aquello que quisiste o se te ocurrió, nada de lo que tienes te lo han dado, nada te lo han regalado o impuesto, todo lo que haces, tienes, o dejas de hacer es por ti y para ti, todo lo que te rodea es aquello que decidiste que te rodeara, y te desvelas porque te has acostumbrado a otro estilo de vida, y el estrés es tu amigo y las ojeras muy bien ganadas, y el cabello muy bien perdido, y las dolencias orgullosamente obtenidas, y cada cosa, momento, decisión, impulso que has seguido es felizmente disfrutado, como un helado en el verano, todo es tuyo, ya que importa lo demás, tal vez las cosas no salieron como esperabas pero salieron, pues a final de cuentas, eres efectivamente dueño de tu propio destino. No puede haber algo mejor.
No hay nada que cueste más caro y que se aprecie mejor que la simple y sencilla libertad de volar más y caminar menos. O puedo dejarlo solamente en libertad.